28/4/10

QUE VE UNA RATA MUERTA?

En vida hay experiencias perfectamente íntimas como el sueño o el miedo. Son íntimas porque tenemos cuerpos opacos. La noción errónea de que somos individuos nace de esta opacidad. El individuo se funda en el secreto. No tener secretos equivale a estar muerto. Los espectros son pura superficie visible. Lo que desean, lo que sueñan cuando están dormidos, lo que ven cuando miran a cámara; todo está presente en simultáneo y puede registrarse. Así ve una rata muerta al fotógrafo.
El fotógrafo se pregunta si todos los espectros animales ven a los humanos del mismo modo. En adelante les saca fotos con el único fin de ver cómo es visto por ellos. Ninguna imagen le devuelve lo que encuentra en su espejo todos los días. A veces lo ven óseo, o por partes, o como un monstruo antiguo, o difuso y femenino; otras ni siquiera aparece. Las conclusiones del fotógrafo sobre este fenómeno no difieren de las que obtendría una señora muy peinada y repentinamente escéptica en la fila de un cajero automático.